Al igual que ocurre en la mayoría de países de la Unión Europea, en España las televisiones privadas tienen que destinar el 3% de sus ingresos brutos a la financiación de la televisión pública y el desarrollo del cine y la cultura europea. Este es el caso de Mediaset o Atresmedia, pero también las operadoras de telecomunicaciones como Movistar, Vodafone y Orange deben aportar un 0.9% de sus ingresos. ¿Y qué ocurre con plataformas de streaming como Netflix o HBO? Todo apunta a que no falta mucho tiempo para que tengan que abrir la cartera también.
Unos días después de confirmarse la subida de precios en las tarifas de Netflix, podemos leer en El Confidencial que el Gobierno de España tiene la intención de implantar una tasa a Netflix, HBO, Filmin, Rakuten, Amazon Prime y Sky para que destinen parte de sus ingresos a financiar Radio Televisión Española (RTVE). Los ministerios de Economía y de Hacienda justifican esta medida amparándose en las nuevas normativas de la UE, en las que se debe ampliar el concepto de “operadores de servicios de telecomunicaciones”, donde ya entrarían las plataformas de streaming.
Por el momento, el proyecto se encuentra en fase de consulta pública, es decir, el gobierno realiza una serie de preguntas, en este caso 25, que luego traslada a los distintos implicados, así puede llegarse a un consenso a la hora de redactar la norma, la cual busca “actualizar y modernizar el marco regulatorio audiovisual vigente en la UE, buscando establecer una regulación del audiovisual más acorde con la era digital”.
Hay que decir que esta tasa que se pretende aplicar a Netflix y demás plataformas no fue aceptada con una sonrisa en su momento por parte de Mediaset o Atresmedia. Se calificó como desproporcionada y se recurrió a instancias como el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, aunque al final siempre se le ha dado la razón al ejecutivo español. El año pasado, por ejemplo, tuvieron que destinar 130 millones de euros por esta normativa.