Esta adaptación del popular manga cyberpunk tiene un guión coescrito por James Cameron y Laeta Kalogridis (creadora de Altered Carbon). Cameron se interesó por este proyecto a finales de los noventa cuando, según las notas de producción de Alita: Ángel de combate, Guillermo del Toro le recomendó que leyera esta serie de anime. Pasaron los años y Cameron, que ha estado muy ocupado últimamente con el desarrollo de sus próximas secuelas de Avatar, le pidió a Rodriguez que se ocupara de este proyecto.
Hasta ahí todo correcto, tenemos gente bastante importante de la industria del cine a cargo de esta película, y eso que ni siquiera hemos mencionado todavía a Weta Digital, el estudio de efectos visuales de Nueva Zelanda y fundado por Peter Jackson al que le debemos hazañas de la captura de movimiento como la trilogía de The Lord of the Rings o Avatar y que también se encargó de Alita.
El gran fallo argumental de Alita
Alita está ambientada en el año 2563, han pasado 300 años desde ‘La Caída‘, una gran guerra ocurrida y que habría dado inicio a las condiciones de postapocalipsis en las que se viven en el siglo XXVI pero que no me acabó de quedar claro en qué consistió, a pesar del intento por intentar aclararlo.
La premisa de la película es simple, el cirujano Dyson Ido encuentra la cabeza y parte del tronco de una androide en un vertedero de basura de la megalópolis en la que reside. Ido consigue fijar la cabeza y corazón encontrados a un cuerpo sintético y Alita cobra vida, (haré un inciso aquí, ya que el realismo de esa escena no tiene precedentes, se nota que cada milímetro de la cara tiene esculpido hasta el más mínimo detalle y le da una sensación de realidad asombrosa), y ése por triste que parezca es el mayor logro de esta película, que consigue mezclar con absoluta perfección a seres de carne y hueso con seres sintéticos, a objetos reales con otros generados por cgi, sin que se vea donde acaba lo real y empieza la digitalización.
Las subtramas innecesarias
Alita es una adolescente tratando de entender quién fue antes de que el doctor Ido la encontrara y frustrada porque no puede recordar nada de su vida anterior. No podía faltar la historia romántica, gracias a la figura de Hugo, cuyo único deseo en la vida es salir de la ciudad y ascender a Zalem, la ciudad flotante sobre Iron City donde viven los humanos privilegiados.
Pero el argumento no termina ahí. También hay cazadores de recompensas que tratan de capturar y matar a los androides proscritos. Una subtrama de robo de extremidades cibernéticas para su venta en el mercado negro. Sabremos un poco más sobre la historia de la familia del doctor Ido. Por otro lado, es triste ver a como han desaprovechado tanto a Chiren, interpretada por Jennifer Connelly que tiene muy poco peso en la historia. La película además cuenta con una gran cantidad de referencias.
Lo mejor y lo peor de Alita
Lo que le sobra a Alita son líneas argumentales e incluso duración. (Hablo por mí, ya que vi la película con la duración estándar y 40 minutos extra de escenas eliminadas del metraje principal), lo que le falta es un guión con una estructura mejor definida para no caer tanto en los típico clichés amorosos.
A pesar de sus muchos problemas narrativos, Alita es un espectáculo visual tanto en 2D como en 3D, además aquí es donde sobresale la película, y Lo justifica el hecho de que filmaran esta película en 3D nativo, además de por la dirección de fotografía de Bill Pope (Matrix) y sus gamas de colores saturadas. Incluso en la pantalla grande es difícil distinguir lo real de lo digital.
Pero sí tengo la sensación de que este título podría haber sido mucho más efectivo, y emotivo, si además de funcionar a nivel tecnológico con tanta precisión, hubiera sabido contener una historia más precisa.
Esto ha sido todo por el momento, ¿qué os ha parecido la película? Déjanos un comentario por aquí abajo.
