Continuamos con el maratón de críticas de Star Wars antes del inminente estreno de ‘El Ascenso de Skywalker’. Hoy le toca el turno a ‘Rogue One: Una historia de Star Wars’.
Cuando se anunció que el primer spin-off de la saga trataría sobre cómo los espías rebeldes robaron los planos de la primera Estrella de la Muerte, muchas fans pensaban que esta historia no merecía una película. Pero sin duda, todos nos equivocamos, y finalmente Rogue One es una de las mejores películas de la saga.
Uno de los puntos fuertes de esta película es la crudeza con la que nos muestran la guerra. Y es que la guerra es la guerra, y aquí no nos esconden nada. Desde el principio vemos como los protagonistas no son perfectos, son espías y luchan en una guerra en la que verdaderamente pueden morir. Por ello no dudan en matar, mentir, engañar y hacer todo lo necesario por el bien de la rebelión.
Hay que destacar cómo esta película une perfectamente el universo Star Wars, concretamente con las dos series animadas The Clone Wars y Star Wars Rebels. En esta series conocemos a Saw Guerrera. Además de que tenemos otra referencia a Rebels cuando se oye en Yavin IV que llaman a la General Syndulla, una de las protagonistas de la serie. También vemos a Chopper, el astrodroide de los protagonistas, y su nave llamada Ghost en la batalla de Scarif.
Continuando con la Batalla de Scarif, hay que decir que es de las mejores escenas de la película, ya que vemos la batalla contra el Imperio tal y como veíamos en la trilogía original, pero con efectos modernos, y la verdad esta mezcla se ve genial en pantalla. Ahora entendemos los créditos del Episodio IV, en los que dice que la flota rebelde está diezmada por una batalla contra el Imperio.
Y también une perfectamente con las precuelas. Vemos un planeta muy conocido: Mustafar. Una gran referencia a Episodio III y la gran simbología de Vader al elegir este sitio. Ahí es donde Anakin murió junto con Padmé, en Mustafar nació Darth Vader.
Una de las grandes escenas que nos deja la cinta es en la que la Corbeta Cabeza de Martillo. Este modelo era el más común en la Antigua República.
Pero sobretodo resuelve una gran duda de la trilogía original: el fallo de diseño de la Estrella de la Muerte. Un gran fallo que ahora sabemos que fue puesta a propósito por el padre de Jyn.
Y sin duda, la mejor uni´çon con la trilogía original es ese magnífico final con Vader desatando su poder.
La película nos trae de nuevo otros personajes pero esta vez de la trilogía original, como es el Gran Moff Tarkin. Recreado mediante CGI, se ve visualmente muy bien y cuesta ver que se trata de ordenador. Hay que decir que con Leia se nota más esta recreación, pero sin duda fue uno de los mejores momentos verla en el Tantive IV.
Algo que hace que esta película la considere de los mejor de la saga es que tiene un final agridulce. Finalmente los rebeldes se hacen con los planos, pero a un alto precio. Todo el comando Rogue One muere en la misión. Esto hace que veamos la guerra contra el imperio de una forma más real. Como en toda guerra, la gente muere, y los “héroes” y protagonistas, también pueden morir.
Que la Fuerza os acompañe.
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