No nos esperábamos el desastre que están pintando las primeras críticas de Hellboy. Vale, seguramente no íbamos a encontrarnos una obra maestra del séptimo arte, pero lo últimos tráilers invitaban a pensar que podía salir algo bastante decente, una buena adaptación de los cómics de Mike Mignola, con su correspondiente ración de gore y violencia propia del personaje y de sus aventuras, y parece que nos vamos a llevar una decepción.
Está claro que toda crítica hay que cogerla con pinzas y que, a la hora de la verdad, es nuestra propia experiencia frente a la gran pantalla lo que cuenta, pero no podemos evitar levantar una ceja al ver el bombardeo que está sufriendo la película en Rotten Tomatoes. A la hora en que estamos redactando esta noticia, la cinta tiene un 13% de aprobación con una nota de 3.5, así que el asunto no pinta nada bien. Os dejamos algunos ejemplos:
- Jeannette Catsoulis (New York Times): “El fin se acerca, dice uno de los amigos de Hellboy que se está muriendo al principio de la película, y yo ya estaba pensando, oh sí, por favor”.
- Peter Hartlaub (San Francisco Chronicle): “A las dos horas, Hellboy se siente como si hubiesen pasado casi tres. Y aún así todavía da la sensación de que hay cosas que faltan”.
- Johnny Oleksinski (New York Post): “La carrera por la peor película del año ya está calentando motores. Se podría decir que está más caliente que el infierno, ahora que Hellboy ha cogido la delantera”.
- John DeFore (The Hollywood Reporter): “Es simplemente terrible. Hinchada, muchísimo menos divertida de lo que pretende ser y equivocada en decisiones fundamentales de diseño a pesar de que acierte en las decisiones menos importantes, toma caminos atrevidos que podrían haber funcionado en otras circunstancias. Pero estas no son esas circunstancias”.
¿Cómo hemos llegado a esta situación? Pues según The Wrap, el rodaje fue un completo caos por el choque de trenes entre el director Neil Marshall y los productores Lawrence Gordon y Lloyd Levin. Estos últimos, al parecer, querían tener el control de toda la película, lo que llevaba a interrumpir el trabajo de Marshall de forma frecuente delante de todo el equipo. Otro de los encontronazos tuvo que ver con el despido de Sam McCurdy, el director de fotografía con el que Marshall colabora habitualmente. Y el protagonista tampoco lo ha puesto nada fácil, pues se dice que abandonaba el set de rodaje incluso cuando el director pedía grabar alguna toma más.
Siendo sinceros, todo este asunto deja con mal cuerpo, pero aún siento bastante curiosidad por ver la película, incluso por ver si de verdad es el desastre que nos están vendiendo. Su estreno está previsto para el 12 de abril en Estados Unidos, aunque en países como España tendremos que esperar hasta el 17 de mayo.
